Por Andrés Figueroa Cornejo
El embajador venezolano en Chile, Arévalo Médez, indicó que "el gobierno de Chile en su embajada en Venezuela, haciendo uso de sus derechos establecidos en las leyes internacionales, le está dando cama y comida a Leopoldo López. No podemos decir que se trata de 'asilo'. Es la figura de 'huésped' la más precisa".
Una vez más cientos de solidarias y solidarios chilenos con el proceso antiimperialista del Gobierno Bolivariano de Venezuela, acompañaron a la delegación diplomática de ese país latinoamericano ubicada en la comuna de Providencia de Santiago, en el marco de una nueva intentona golpista fracasada. Fuera de la embajada, un pequeño grupo de venezolanos antichavistas emigrados a Chile y cuidadosamente seleccionados por la administración de extrema derecha de Sebastián Piñera, gritaban groserías en jerga incomprensible en la vereda frente a las dependencias diplomáticas. El presidente multimillonario y pinochetista, caído en desgracia en las encuestas de opinión por sus políticas antisociales con apenas un 25% de aprobación de la población, muy temprano dio su respaldo a otro caído en desgracia, el venezolano golpista Juan Guaidó, y anunció que pronto se reuniría el armado pro-estadounidense Grupo de Lima para tratar los hechos.
El embajador de Venezuela en Chile, Arévalo Méndez, contó que "La información que tenemos de buena fuente es que los gringos desconocían que la base aérea La Carlota tiene defensa antiaéreas. Por ello fracasó el intento estadounidense de sacar 'de manera espectacular' a Guaidó, al actualmente prófugo de la justicia, Leopoldo López, y los demás."
Méndez indicó que "el gobierno de Chile en su embajada en Venezuela, haciendo uso de sus derechos establecidos en las leyes internacionales, le está dando cama y comida a Leopoldo López. No podemos decir que se trata de 'asilo'. Es la figura de 'huésped' la más precisa".
Por otra parte, el diplomático expresó que "la derecha venezolana prácticamente no tiene arte ni parte en el plan que conduce Estados Unidos, algunos gobiernos europeos y otros pocos latinoamericanos, de dar un golpe de Estado en Venezuela. En 20 años no han entendido la heroicidad del pueblo venezolano ni su convicción de que no es posible ni un golpe de Estado ni una guerra civil. Y al no ser posible ninguno de estos dos caminos, la derecha ha entregado el poder al extremismo de Estados Unidos para que se encargue de hacer la tarea que ella no pudo hacer".
Asimismo, Arévalo Méndez enfatizó que "estamos enfrentando al más poderoso imperio que ha existido en la historia del mundo. La historia nos está enseñando que cuando Hugo Chávez propuso un proyecto político moderno, realmente enraizado en las querencias, y en las necesidades sociales, culturales, económicas y ambientales del pueblo venezolano, tenía razón", y agregó que "el pueblo, la comunidad, las estructuras del Estado y sus Fuerzas Armadas ya no están para aceptar imposiciones del gobierno estadounidense".
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